Jerez de los Caballeros: ciudad templaria de grandes torres

En una de nuestras escapadas de fin de semana decidimos visitar la localidad de Jerez de los Caballeros, al sur de la comunidad autónoma de Extremadura. De ella nos atrajeron sus galas y su ambiente en Templarios, su pasión y fervor en Semana Santa y la belleza e historia que encarna durante todo el año. Es un placer pasear por sus calles descubriendo cada uno de sus entresijos. Eso sí (aviso para navegantes), nada de tacones o zapatos incómodos. Famosas son también las empinadísimas cuestas de Jerez. Aquí os dejamos nuestra experiencia:

¿Qué visitamos?

• Parroquia de San Miguel. Data del siglo XIV y fue edificada por los caballeros de la Orden de Santiago. Resulta curiosa en su exterior, pero especialmente llamativa en su interior, con un bonito retablo donde destaca la imagen del Arcángel San Miguel. También es de admirar el coro del templo, todo hecho de madera.

• Fortaleza de los Templarios y Torre Sangrienta. Del siglo XIII, esta fortaleza de origen templario se conserva a la perfección. Casi dos kilómetros de muralla y 18 torres en pie hacen de este recinto amurallado una visita obligada. La más famosa de estas torres es la Torre del Homenaje, popularmente conocida como Torre Sangrienta, lugar donde perdieron la vida los últimos caballeros templarios de Extremadura.

• Iglesia de San Bartolomé. De estilo barroco, esta preciosa iglesia data de los siglos XV-XVI. En la fachada llaman notablemente la atención sus colores, su ornamentación y sus azulejos.

• Iglesia de Santa María de la Encarnación. La foto está tirada desde la misma Fortaleza Templaria, desde donde se admira perfectamente esta iglesia. Al parecer, es el templo más antiguo de la ciudad, ya que su construcción se remonta a la época visigoda, aunque más tarde fue reformado. 

• Torre de San Miguel Arcángel. De todas las torres que tiene la localidad, probablemente sea la que cuenta con un atractivo mayor, y eso que las demás no se quedan atrás. De estilo barroco, se eleva a partir de la puerta de la parroquia del mismo nombre. Como guinda del pastel, en la parte superior de la torre se encuentra la figura de San Miguel Arcángel, que inevitablemente nos hace acordarnos del Giraldillo.

• Iglesia de Santa Catalina. Edificio gótico del siglo XV, aunque con varias peculiaridades, ya que su fachada es de estilo barroco y su torre clasicista. En su interior se encuentra la imagen de Santa Catalina.

• Puerta de Burgos. Una de las dos puertas de la muralla que se conservan en la actualidad (la otra es la Puerta de la Villa). Al parecer, su nombre procede de su orientación hacia Burguillos del Cerro, pueblo medieval que se encuentra a pocos kilómetros de Jerez. Custodiando esta puerta encontramos la figura de Hernando de Soto.

• Casa Natal y Centro de Interpretación de Vasco Núñez de Balboa. Cerca del centro de Jerez podemos visitar la casa natal de Vasco Núñez de Balboa, descubridor del Océano Pacífico.

• Museo de Arte Sacro. Ubicado en el antiguo Palacio de la Vicaría, donde podemos contemplar objetos religiosos que se encuentran de alguna manera relacionados con la localidad de Jerez de los Caballeros.

¿Dónde comimos?

• Bar La Ermita. ¿Que por qué se llama La Ermita? No os lo vais a creer. Bueno, resulta que este bar está dentro que de una iglesia. Sí, sí, con su altar, su sacristía (que ahora son los baños) y todo. Donde antes habría bancos de madera para que los fieles escucharan misa, ahora hay una enorme barra y taburetes para que los clientes nos tomemos unas cervezas. No sé qué os parecerá a vosotros, a nosotros nos resultó, cuanto menos, curioso y muy original. Desde luego, nunca habíamos visto nada igual.

• Plaza Café. Paramos en este bar situado en la Plaza de España para tomar café y unos dulces. La terraza es bastante agradable, con vistas a la Parroquia de San Miguel, y está rodeado de otros bares, de restaurantes y de tiendas, ya que se encuentra en pleno centro de Jerez.

¿Qué nos trajimos?

• Bollo turco. Después de observar que varias tiendas locales anunciaban este producto como algo típico de la ciudad, no podíamos irnos sin probarlos. Este delicioso dulce puede comprarse durante todo el año, aunque se consume sobre todo en Navidad. Está hecho con almendras, huevo, azúcar y ralladura de limón y la receta ha ido pasando de generación en generación. Al parecer, existen datos de que ya se elaboraba a comienzos del siglo XVII.

• Cerveza Soto. Según estudios, Extremadura es una de las comunidades españolas donde más se consume cerveza, y cada vez son más las artesanales que salen al mercado. En esta ocasión nos trajimos la Soto Lazarillo (5,2%), una cerveza de trigo de Barcarrota, un pueblo cercano a Jerez. Nos pareció una cerveza muy interesante, con bonita espuma y ligero sabor afrutado. Aparte de esta Lazarillo, existen otros dos tipos más de Soto, aunque, por lo que tenemos entendido, en la actualidad el dueño no sigue produciendo cerveza.

• Muchos recuerdos y un dulce sabor de boca, jeje.